El consumo de cocaína no para de aumentar en España desde hace años, haciéndolo, además, a un ritmo creciente. Es actualmente la droga ilegal más consumida después del cannabis según los estudios realizados por el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT), siendo además nuestro país el mayor consumidor de esta droga de toda Europa.
Esta tendencia no se ha frenado ni siquiera durante los años de pandemia, durante los que no hubo incremento del consumo general de estupefaciente, pero durante los cuales los adictos a la cocaína aumentaron más de un 10%. El dato es muy preocupante, ya que los efectos que produce la cocaína en el organismo a nivel sistémico son múltiples y muy negativos.
Sabemos que la cocaína afecta al estado anímico, que crea dependencia y que afecta sobre todo al sistema nervioso central. Sin embargo, no es tan conocido que una de las primeras partes del organismo en verse afectada por el consumo de esta droga es precisamente su puerta de entrada, la nariz.
Cómo afecta la cocaína a la nariz
La nariz tiene un papel fundamental para el organismo. Además de ser el orificio por donde entra el aire, prepara a éste para que llegue bien acondicionado a nuestros pulmones, filtrándolo, humificándolo, y calentándolo.
La inhalación regular de cocaína puede causar daños en la nariz y en el sentido del olfato de diversa índole y gravedad, tales como:
- Irritación de la mucosa
- Sequedad nasal y formación de costras
- Inflamación crónica y secreción continuada
- Dolor nasal
- Dificultad respiratoria nasal
- Alteración o pérdida del olfato
- Hemorragias nasales
- Infecciones de los senos paranasales (sinusitis)
- Perforación y destrucción del tabique nasal
- Perforación del paladar
- Hundimiento y deformidad nasal
Pero las repercusiones pueden ir mucho más allá y ser irreversibles. Los efectos de la cocaína en la nariz pueden llegar a destruir totalmente este órgano
¿Por qué afecta el consumo de cocaína a la nariz?
La cocaína es una sustancia que se absorbe fácilmente por las mucosas y además es “vasoconstrictora”, es decir, que obstruye la circulación de sangre en las terminaciones capilares, incluyendo por supuesto las que acaban su recorrido en la nariz.
Inhalar cocaína provoca por un lado una irritación e inflamación de las fosas nasales, lo que causa una mayor secreción y congestión nasal. Por otro lado, su acción vasoconstrictora y de obstrucción de los capilares sanguíneos, provoca una deshidratación de la zona nasal, lo que tiene como consecuencia que la nariz se vuelva mucho más propensa a sufrir infecciones, heridas, irritación, etc.
Con el consumo continuado, la persona consumidora de cocaína puede terminar sufriendo perforaciones importantes de los tejidos y del tabique nasal.
Es importante resaltar que los efectos de la cocaína en la nariz pueden variar en función de diferentes factores, como la pureza de la droga o la frecuencia o duración del consumo.
Perforación del tabique nasal por consumo de cocaína
El tabique nasal o septum, está formado por cartílago, que va desde el dorso nasal hasta el paladar, y está cubierto a ambos lados por mucosa y vasos sanguíneos.
El tabique nasal tiene 3 funciones principales:
- Separar las dos fosas nasales.
- Mantener la forma de la nariz.
- Calentar el aire frío antes de llegar a los pulmones
Una de las consecuencias más graves que se produce en la nariz por consumo de cocaína a medio y largo plazo, es la perforación del tabique nasal
Los síntomas de que se está produciendo una perforación del tabique nasal por consumo de cocaína son la congestión nasal crónica, hemorragias nasales frecuentes, un silbido al respirar, la aparición de una úlcera en el tabique nasal o de un orificio visible en la pared del tabique.
El consumo crónico o excesivo de cocaína, además de la perforación del tabique nasal también puede llegar a provocar la perforación del paladar.
Tratamiento de perforación de tabique nasal por consumo de cocaína
El tratamiento para la perforación del tabique nasal por consumo de cocaína implica, por un lado y como es lógico, la eliminación del consumo de la misma, y por otro la cirugía para reparar la perforación y reconstruir el tabique nasal, lo que se realiza utilizando colgajos mucosos de las zonas indemnes, si las hubiera.
La cirugía también se puede combinar con una operación de nariz de carácter más estético como es la rinoplastia, para recuperar e incluso mejorar la forma de la nariz, para la cual en estos casos es frecuente utilizar injertos cartilaginosos tomados del pabellón auricular o de una costilla.
En caso de sufrir problemas en la nariz por consumo de cocaína, puedes consultarnos y estaremos encantados de aconsejarte en el tratamiento que mejor se adapta a tu caso.